«El tirador enmascarado que logró escapar en un patinete eléctrico después de matar a tres personas en el centro de Uppsala tiene 16 años y ha sido ya detenido, según el fiscal responsable, Andreas Nyberg . Asesinó a tiros ayer a sus tres víctimas, que tenían entre 15 y 20 años, en una peluquería. La motivación de los crímenes no ha sido todavía aclarada.Fue un «incidente aislado» que no tenía nada que ver con las próximas celebraciones de la Noche de Walpurgis, ha informado el portavoz de la policía Erik Akerlund en una conferencia de prensa. Akerlund no ha querido confirmar que los crímenes estén relacionados con el notorio mundo de las pandillas suecas.Sin embargo, muchos detalles del tiroteo son similares a incidentes anteriores que involucraron a bandas rivales, desde la corta edad de las víctimas hasta la apariencia del sospechoso arrestado. Según el canal de televisión SVT, una de las víctimas es sospechosa de haber planeado un atentado contra un familiar del jefe de una banda.El ministro de Justicia, Gunnar Strömmer , ha reconocido que se trata de un incidente «extremadamente grave». El alcalde de Uppsala, Erik Pelling , ha declarado que está «conmocionado y consternado» por los acontecimientos. También se ha mostrado «enfadado» y «frustrado porque no hemos sido capaces de controlar mejor el problema».Noticia Relacionada estandar Si El Kremlin recluta drogadictos en Suecia para llevar a cabo sabotajes en su «guerra híbrida» Rosalía Sánchez | Corresponsal en Berlín Son menos llamativos y pasan inadvertidos ante las fuerzas de seguridad, que los clasifican como delincuentes habituales y no los asocian con una fuerza extranjeraEn Suecia existe desde hace años una guerra entre bandas por el tráfico de drogas, que ha conducido repetidamente a enfrentamientos violentos. Estas bandas se dedican también a la intimidación y el chantaje a empresas y particulares.Las pandillas a menudo reclutan a adolescentes menores de edad para los delitos porque aún no son penalmente responsables en Suecia. Según estimaciones policiales anteriores, más de 60.000 personas en el país escandinavo de once millones de habitantes tendrían conexiones con bandas criminales.Uno de los casos más sonados fue, el año pasado, el de un niño de 11 años que escribió en redes: «Hermano, no puedo esperar más para ver mi primer cuerpo». Había sido captado en una aplicación de chat y la respuesta de un pandillero de 19 años fue: «Mantente motivado, todavía está llegando». Se le habían ofrecido al niño el equivalente a 13.000 euros por un asesinato, además de ropa y transporte a la escena del crimen. Los tres últimos asesinatos han tenido lugar en vísperas del popular Festival de Valborg, la Noche de Walpurgis, que se celebra anualmente en Uppsala. Según el portavoz de la policía, Magnus Jansson-Klarin , se esperan entre 100.000 y 150.000 visitantes en la ciudad. «La gente no debería tener miedo de venir», ha tranquilizado el portavoz, «no existe peligro para la población».
Fuente: abc.es
